El hombre que me atendió en la Librería Española fue muy amable guiándome un poco entre los libros y otras publicaciones de las que disponía. Hablándome de los años de guerra mostraba una hostilidad comprensible hacia el PSUC ( Partit Socialista Unificat de Catalunya, al cual había pertenecido Ramón Mercader, el asesino de Trotsky en Coyoacan, México) y manifestaba una simpatía por la socialdemocracia, así el PSF de François Miterrand, que por aquel tiempo andaba en un programa de Unión de la Gauche con George Marché, secretario general del PCF.
Finalmente, en esa ocasión me llevé el libro Historia de España de Pierre Villar, edición de la propia Librairie Espagnole en tapa blanda, un compendio breve pero útil de historia y una revista, Tribuna Socialista, editada en Nueva York, por el ala izquierda del POUM, cuyo principal responsable era Eugenio F. Granel. A su hermano Mario Granell lo trataría asiduamente años más tarde en Vigo a su regreso de Venezuela, sobre todo en la taberna La Viuda y para quien Adolfo Lareo y este suscribiente movimos, a su fallecimiento, petición de una calle en Vigo, que se logró con la Alcaldía del Doctor Carlos Príncipe.
En cuanto a Eugenio Granell, también años más tarde, tendría ocasión de conocer a su hija Natalia en la Fundación que lleva el nombre de su padre, situada en el Pazo do Marqués de Bendaña, Praza do Toural, en Santiago de Compostela, asistiendo a unas charlas sobre la etapa dominicana de Eugenio y frecuentando la biblioteca, en su doble vertiente de fondos de arte y política (trotsquismo y marxismo) con muy variadas ediciones no sólo españolas.
Retornando al encuadre del proprietario de la Librairie Espagnole decir que llegaría a nonagenario, con obituario publicado en el diario El País, salvo confusión de mi parte. Otras visitas sucederan a esta y otras librerías parisinas, entre ellas, Le Phénix, librería china en el boulevard de Sebastopol.
Seguiremos por los meandros de la memoria.
XUR O'PONTILLÓN.